Planificación, Gestión y Derecho a la Ciudad

Mg. Arq. Eugenia Jaime

En un panorama de aumento irrefrenable de la tasa de urbanización del mundo (65% hacia el 2050)[1], los modelos urbanos de desarrollo aún no cambiaron y siguen generando una proliferación de grandes áreas urbanas en condiciones de pobreza, precariedad y vulnerabilidad. En América Latina son numerosos los países en los que se registran “avances legislativos en temas de planificación y gestión del suelo”. (Fernandes, 2016)

Colombia y Brasil son quienes han logrado implementar y organizar marcos jurídicos con algunos logros en materia de regularización del suelo desde una perspectiva de derechos. Chile ha implementado un modelo del subsidio a la demanda, con algunos rasgos comunes a Perú que ha operado con un sistema de titulación en asentamientos informales.

Sin embargo el desafío de gestión urbana sigue latente ya que requiere la actuación articulada sobre las causas del conflicto. Conflicto cuyo origen no se restringe a la dimensión dominial.

Las causas que determinan los procesos de urbanización informal son juridicas pero también económicas, políticas y sociales. Los diversos procesos informales que suceden en Latinoamérica, aunque tengan expresiones físicas parecidas, con frecuencia tienen características jurídicas distintas y requieren soluciones jurídicas diferentes

Esto nos lleva a identificar una fuerte relación entre la Planificación y  gestión urbana. La primera intrínsecamente elitista, la segunda tecnocrática, burocrática sin posibilidad de acción de los gobiernos locales. Sin olvidar un sistemas jurídicos obsoletos, refiriéndonos al concepto central que es la propiedad privada.

En Argentina, el mayor problema radica en una estructura de derechos que prioriza prevalentemente el derecho privado de uso del suelo. Esto se lee en los programas de políticas de vivienda de interés social donde a pesar de los intentos de numerosos juristas, ong y políticos vinculados a los derechos humanos no se ha logrado trascender la perspectiva del derecho administrativo.

No obstante en los últimos años hemos logrado llevar a cabo algunos avances en esta materia que fueron reconocidos internacionalmente. Leilani Farha la relatora en la Asamblea General de ONU, en el Informe la Relatora pone de relieve la Ley de Acceso Justo al Hábitat como instrumento de intervención en el mercado inmobiliario y parte de una estrategia de hábitat[2].

En cuanto a la regularización dominial, la ley de Acceso Justo al Hábitat constituye un modelo de gestión que donde “los servicios habitacionales que brinda una vivienda adquieren su real dimensión en la complejidad de la configuración socio espacial del área en la que se localizan y requieren de un abordaje integral que impone contar con nuevos principios rectores, políticas diversificadas e instrumentos de actuación acordes con dicha problemática”.[3]

Los derechos colectivos, como el derecho a la ciudad y a la vivienda, la función social de la propiedad, y la gestión democrática de la ciudad o el reparto equitativo de cargas y beneficios son los principios rectores que guian el articulado de la ley 14.449 de la Pcia de Buenos Aires.

A pesar de los expuesto la modificación del Código Civil y Comercial de la Nación llevado a cabo en 2016 no logró re-incorporar “la función social de la propiedad” en su articulado.

Hoy podríamos hablar de función social del suelo ya que se trata de un derecho colectivo que trasciende el orden jurídico de la propiedad. Existe una fuerte tensión entre el derecho civil, el derecho administrativo y el derecho urbanístico, y la dimensión central la ocupa la política pública en su rol de legitimadora de un orden social.

En esta línea los últimos tres años han sido de difícil batallar para la instrumentación de la ley. Los instrumentos que presenta la ley para intervenir en el mercado inmobiliario y como parte de una estrategia de hábitat fueron boicoteados desde que comenzaron con la reforma de los ministerios a comienzos de este año.

Han sido cuantiosas las herramientas que la ley de acceso justo al hábitat ha puesto a disposición para la resolución de problema, a pesar de ello «ninguna forma concreta de titulación del suelo protege a los residentes contra las presiones ejercidas por las fuerzas del mercado«. (Fernándes, 2011)

Sobre las estrategias para superar los obstáculos.

Retomando el análisis del “Informe sobre enfoque en Políticas de Suelo” donde se desarrolla “la carga de la informalidad”, veo necesario reflexionar sobre los plazos que suspenden desalojos y no proponen soluciones a las cargas que este limbo jurídico le imprime a las familias que acceden informalmente al hábitat en tanto las dimensiones sociales, legales, urbano-ambientales, políticas, económicas y fiscales por las que atraviesan.

Si consideramos la escala del problema es necesario revisar la asignación de recursos que se destinan a la regularización y mejoramientos del hábitat. En Argentina del total de viviendas que producen las políticas públicas dos tercios son viviendas nuevas y un tercio mejoramientos, mientras que el déficit oficial tiene valores inversos, es decir solo un tercio de las familias que viven en situación de déficit requiere una vivienda nueva.

Buena parte de la política de regularización no interviene ni sobre lo construido ni sobre la normativa urbana. En nuestro país se había logrado reunir en el mismo ministerio la Dirección de Ordenamiento urbano, Geodesia y la Subsecretaría Social de Tierras, Urbanismo y Vivienda pero actualmente han pasado la primera a Ministerio de Gobierno, la segunda a la agencia de recaudación de la provincia y la tercera al ministerio de desarrollo social. Esto ha operado negativamente en la superación del obstáculo de la fragmentación en la estructura del estado.

Otra forma de trascender los obstáculos es trascender la focalización, articulando la gestión del suelo con la gestión del construido y la gestión del dominio. Así incorporar los edificios vacíos en áreas centrales, es tan necesario como tener presentes las áreas rurales y las formas de inquilinato, generar nuevas unidades, regularizar el dominio, gravar el uso del suelo, proteger contra el desalojo  garantizando la permanencia de las personas

Se trata de un fenómeno complejo que requiere de intervenciones integrales y articuladas. No se puede actuar de manera mecánica. Cada territorio presenta particularidades que admiten actuar en distinto orden y con distintas reglas sin embargo existen principios rectores como la función social del suelo que son inalienables si queremos terminar con los procesos de desigualdad que se manifiestan en la proliferación del hábitat informal.

[1] http://www.un.org/es/development/desa/news/population/world-urbanization-prospects-2014.html

[2] Informe de la Relatora Especial sobre una vivienda adecuada como elemento integrante del derecho a un nivel de vida adecuado y sobre el derecho de no discriminación a este respecto, 15 de Enero de 2018, párrafo 127.

[3] Construcción del territorio, mercado y política. La experiencia de la ley de hábitat popular en la Provincia de Buenos Aires. Eduardo Reese Instituto del Conurbano – Universidad Nacional de General Sarmiento, en: A construção do direito urbanístico na América Latina [livro eletrônico] / Edésio Fernandes e Betânia Alfonsin ( Organizadores) – Belo Horizonte : Gaia Cultural – Cultura e Meio Ambiente, 2016.

Encuentros

Encuentros, la perspectiva de género en los ámbitos universitarios

Junio también fue un mes de encuentros, pero esta vez trabajamos la perspectiva de género en los ámbitos universitarios, de la Universidad de Cuyo y Universidad de Flores.

Los días 10 y 14 de junio, representantes de diversos colectivos, nos encontramos con estudiantes conmovidas por la necesidad de expresar las inquietudes y los resultados de los procesos de trabajo transitados. Con ánimos de escuchar y exponer las estrategias de resistencia contra las etiquetas, contra las formas de conocer predefinidas según las reglas de un sistema patriarcal y capitalista que niega aquellas historias que estén fuera del mandato productivista.

En ambos encuentros “Urbanismo y Perspectiva de Género, nociones básicas para el debate” (UFlo)  y “Derecho a habitar” (UCuyo), las exposiciones atravesaron prácticas cotidianas de la docencia, investigación, dirección de obra, militancia, entre tantas acciones que históricamente las mujeres hemos llevado adelante colectivamente, no sin resistencia, en compañía con otras y otros pares con vocación transformadora.

Del primero, participaron: Martha Alonso Vidal, quien nos propuso un recorrido por las transformaciones en las ciudades y en la representación del cuerpo femenino para reflexionar acerca de la sexualización de los roles que se han institucionalizado en una historia de producción urbana. Ines Moisset, con un exhaustivo trabajo de investigación colectiva que desde “Un día Una Arquitecta” multiplican en medios de comunicación masiva para recuperar el aporte de las mujeres que han sido omitidas en los relatos oficiales sobre la historia de la arquitectura y el urbanismo. Eugenia Jaime, invitándonos a pensar sobre las potencialidades y los desafíos de la incorporación de las problemáticas de género en la formación sin perder de vista el contexto en el que se inscribe aquello que se enseña y se aprende en el aula, resaltando la importancia de los procesos en los que se inscribe el producto terminado. Procesos que los guía un sentido, procesos que múltiples actores protagonizan en la gestión de las trasformaciones y que desde la matriz productivista son despreciados. Y Clara Mansueto, compartiendo lecturas espaciales que indagan en aquello que sucede, pero no se ve, aquello que se escapa de mirada formal del espacio y de la perspectiva de transformación desarrollada tradicionalmente en la producción de arquitectura. 

Del segundo encuentro participaron: Soledad Perez exponiendo el trabajo que desde CISCSA realizan con vecinas de diferentes barrios populares de la Ciudad de Córdoba y la construcción de una “agenda de derechos de las mujeres a la ciudad”, exponiendo los 6 puntos que sostienen la participación de las mujeres desde diferentes experiencias de vida. Cinthia Rizzo, recuperando el rol de las mujeres de barrios populares en la coordinación y promoción barrial de los mejoramientos habitacionales que la organización “Madre Tierra” desarrolla en el AMBA. Virginia Miranda, exponiendo el trabajo que desarrolla “Ando habitando” un colectivo de mujeres transdisciplinar que junto con organizaciones barriales de Mendoza promueve mejoramientos en los espacios públicos, valorando las voces de lxs jóvenes, de lxs niños y de las mujeres.  Alicia Alcaraz y Andrea Casabuono, representando a la comisión Hábitat y Género de Habitar Argentina, expusieron la historia de conformación de esta comisión. Enfocándose en el interés de aportar con la perspectiva de género a las políticas habitacionales que hoy reúne a grupos con experiencias multisectoriales y de diversos territorios. Macarena Vergara, compartiendo momentos singulares en la experiencia de SEDECA, para reflexionar acerca de las tareas de cuidado y la desigual dedicación que recae en las mujeres, su tiempo de descanso, de ocio, productivo, etc. Y Teresita Sacón, quien exhibió los logros y dificultades encontradas ante las acciones que Proyecto Habitar impulsó en la incorporación de políticas de igualdad de género en una obra de construcción de viviendas con trabajadores de la económica popular.

Nadie nace de un repollo y las transformaciones tampoco. Es por ello que pensamos e invitamos a pensar estos “eventos públicos”, como encuentros. Encuentros, porque son oportunidades para saberse en un colectivo mayor, que lo define la convicción de encontrarse en busca de nuevas formas de relacionarnos, llevándolas adelante, asumiendo riesgos para dejar en la historia de las cosas y las personas, nuevas formas de trato social, democráticas, de igualdad, de apropiación, de libertad en la pluralidad y diversidad de géneros.

 

ph Miguel Caamaño

ph Miguel Caamaño

ph Ando Habitando

ph Ando Habitando

 

CONCURSO

CONCURSO DE ESTUDIANTES

“CASA VIOLETA PARRA, ESPACIO COLECTIVO”

REFUGIO TRANSITORIO PARA MUJERES VÍCTIMAS DE VIOLENCIA DE GÉNERO

ORGANIZA PROYECTO HABITAR Y APARECIDA EN RED ANDO

 

Lxs invitamos a producir una mirada crítica del presente, que indague en el proceso de producción del espacio que nos trajo hasta aquí para proyectar un espacio futuro, que estimule relaciones sociales justas y democráticas.

 

A partir del NI UNA MENOS hemos logrado como sociedad comenzar a problematizar de manera consciente la violencia que oprime al género femenino y los cuerpos feminizados.

Esto ha permitido que poco a poco en las instituciones académicas se comience a incorporar esta problemática a las que habitualmente están consagradas como “problemas”.

Desde Proyecto Habitar nos fuimos incorporando lentamente al debate allá por el 2014, desarrollando desde nuestra práctica proyectual en los consultorios de Atención Primaria de Hábitat[1] programas arquitectónicos que atiendan tanto a las desigualdades sociales como las diferencias de género, propias del desarrollo urbano capitalista.

Hoy, con más experiencia y mayor comprensión, queremos invitar a la reflexión conjunta sobre el espacio a partir de una necesidad concreta surgida en el espacio militante de “Aparecida En Red Ando” organización que trabaja con víctimas de violencia de género y con quienes hemos compartido numerosos encuentros de lucha contra la opresión que sufren los pobladores de los barrios populares, en particular de los barrios Un Techo para Todos y 22 de enero en la Matanza.

¿Por qué relacionar violencia de género y espacio?

Porque la violencia de género es un fenómeno que ocurre prevalentemente en los espacios de la vivienda. La vivienda como consagración de lo privado, reino de la reproducción, cristalización de la división sexual del trabajo.

Por otro lado, porque es necesario encontrarnos reflexionando sobre los procesos de transformación del espacio mediante el cual las personas se relacionan, establecen acuerdos, hacen historia. Es decir, aprender a mirar y proyectar en y a través de la arquitectura. La dominación que se ve en las relaciones de género también se puede leer en el espacio, y es allí donde lxs arquitectxs podemos perpetuar o transformar dicha situación.

Y por último y no menos importante, porque a lo largo de varios años de trabajo llevando adelante los consultorios de atención primaria de hábitat, hemos identificado en el espacio cotidiano la violencia que opera sobre la sociedad en su conjunto, violencia que se agudiza en contextos de pobreza, especialmente sobre quienes están signadxs a permanecer en el ámbito privado. Este trabajo que hemos llevado adelante construyendo espacios de participación, de debate colectivo sobre los problemas del espacio, nos permite repensar los problemas que queremos abordar, las acciones que hacemos, los resultados alcanzados y diseñar propuestas como la que hoy nos convoca.

¿Cómo trabajaremos la problemática?

Mediante un concurso, trabajaremos elaborando proyectos en un proceso que invita al análisis, la construcción de un programa, y la prefiguración (social y física) que entendemos necesaria para abordar el problema desde la producción de espacios. 

Construiremos colectivamente el análisis y el programa social de estos espacios en un proceso de formación, que invita a escuchar, debatir y reflexionar. Se trata de un proceso de enseñanza y aprendizaje mediante el cual estudiantes y docentes nos formemos sobre una problemática que atraviesa a la sociedad en su conjunto.

Por tanto, la invitación es volver a mirar en aquellos lugares que para cada uno son tan conocidos que los hace sin pensar. Ya que, estos lugares, lejos de ser corrientes o vulgares son aquellos desde donde realizamos las acciones que nos involucran socialmente, es entonces allí donde entendemos fundamental encontrarnos estudiando y reflexionando: en las relaciones que establecemos cotidianamente y en la producción de arquitectura.

Para abordar esta propuesta hemos organizado el trabajo en un seminario de tres jornadas que forma parte del concurso. En cada una de ellas trabajaremos sobre aspectos del problema en instancias de escucha, debate y espacialización mediante clases teóricas y ejercicios. La asistencia a estas jornadas forma parte de las condiciones que deben reunir los equipos de estudiantes para participar del concurso.

¿Qué resultados esperamos?

Por un lado, se propone que lxs estudiantes, organizadxs en equipos, participen de un concurso de proyectos a dos vueltas que implica la producción de un espacio arquitectónico elaborado en base al programa social trabajado en conjunto.

Por otro lado, el proceso de enseñanza-aprendizaje que aquí se promueve implicará para lxs estudiantes y docentes la participación en una experiencia de trabajo en la que se abordará un problema transversal para la sociedad desde la práctica arquitectónica.

Por último, contamos con el seminario como aporte teórico reflexivo sobre el problema de la violencia de género y su manifestación espacial.

 

PROGRAMA

I JORNADA – Del espacio privado a la construcción colectiva

En esta primera jornada trabajaremos sobre la participación de las mujeres en el proceso de transformación de los elementos urbanos en base al estudio de la experiencia de los consultorios de atención primaria de hábitat desarrollados por Proyecto Habitar. Tomaremos como fuente de información, las entrevistas, los relevamientos y los talleres colectivos registrados para indagar en las características de los espacios donde se desarrollan las actividades cotidianas productivas y reproductivas y la participación de las mujeres en el proceso de transformación de los mismos.

Fecha y lugar: sábado 3 de agosto de 9.00 a 12.00 en la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo de la UBA. Dir: Intendente Güiraldes 2160, CABA

 

II JORNADA – De la violencia a la apropiación consiente

En esta jornada trabajaremos sobre las características del proceso que llevan adelante desde el equipo de Aparecida En Red Ando junto con mujeres víctimas de violencia de género. Indagando en los espacios de participación que generan para posibilitar un ámbito de reflexión, un ámbito donde las mujeres se animen a repensar y desnaturalizar las relaciones de opresión que se ocultan detrás de formas socialmente construidas, con el objetivo de protagonizar la crisis y diseñar estrategias de liberación.

Fecha y lugar: sábado 10 de agosto de 9.00 a 12.00, sitio a confirmar.

 

III JORNADA – Del espacio de la reproducción al espacio de la transformación

En esta jornada trabajaremos en la construcción de un programa social, promoviendo la reflexión sobre las características espaciales que entendemos favorables para la construcción de nuevas formas de trato social. Aquí retomamos con fuerza la necesidad recíproca que tenemos las personas de ir hacia el encuentro, desde allí repensar el espacio, y construir una guía colectiva para las propuestas de resolución formal de un espacio para tal fin.

Fecha y lugar: sábado 17 de agosto de 9.00 a 12.00 en el Centro Misionero del barrio Un Techo para Todos. (dir: las magnolias entre el ombú y las moras, Un Techo para Todos, Ciudad Evita)

 

 BASES Y CONDICIONES DEL CONCURSO

 CRONOGRAMA

SEMINARIO: sábados 3, 10 y 17 de AGOSTO (de 9.00 a 12.00 hs)

ENTREGA DE PROYECTOS: 14 de SEPTIEMBRE

PUBLICACIÓN DE RESULTADOS PRIMERA VUELTA: 21 de SEPTIEMBRE

ENTREGA DE PROYECTOS SEGUNDA VUELTA: 19 de OCTUBRE

EXPOSICIÓN Y ENTREGA DE PREMIOS: 26 de OCTUBRE

 

CONDICIONES

* Los proyectos se elaborarán según el programa social construido a lo largo de los módulos del seminario.

* La entrega será digital y su formato se comunicará durante las jornadas del seminario, y se publicarán en redes sociales de Proyecto Habitar y vía mail a lxs inscriptxs.

* El seminario oficiará como espacio abierto para preguntas. Se abrirá una ronda de preguntas virtual hasta el día 7 de septiembre.

* La entrega de propuestas es por equipos. Los mismos deben estar conformados mínimo por tres y máximo por 5 integrantes, los cuales deben ser estudiantes (pueden estar recibidos con título en trámite). Junto con la entrega de propuestas, cada equipo presentará la documentación que acredite dicha condición.

* Los equipos deben estar conformados por al menos 2 estudiantes de la carrera de arquitectura pudiendo incorporase integrantes de otras carreras.

* Las propuestas deberán ser de autoría de los participantes y no se aceptará más de una propuesta por equipo. Los integrantes solo podrán participar en un equipo.

* Los equipos autores de los trabajos seleccionados en la primera ronda serán notificadxs vía correo electrónico, según los datos de contacto suministrados y publicados en las redes de Proyecto Habitar.

* Lxs miembrxs del Jurado podrán proponer la articulación de los equipos en un equipo común para su presentación en la segunda vuelta.

* Es condición que al menos un representante cada tres o dos cada cinco integrantes del equipo asistan a las tres jornadas del seminario. El seminario es presencial, y a distancia para quienes no viven en el Área Metropolitana de Buenos Aires.

* Aquellos que asistan a la totalidad de las jornadas recibirán un certificado de asistencia al seminario de 12 hs avalado por el Centro de Hábitat Inclusivo de la FADU UBA.

 

INSCRIPCIÓN

Para participar de las jornadas, es requisito realizar la inscripción individual o por equipo en el formulario que se encuentra accediendo al siguiente link: https://forms.gle/D88rWyVXKi2Mqa3AA

 

PREMIO

El premio está compuesto por una selección de libros que abordan la problemática del espacio y la perspectiva de género. A su vez, los proyectos seleccionados formarán parte de una publicación a cargo de Proyecto Habitar, del cual se entregarán ejemplares a lxs participantes. Los trabajos serán difundidos a través de las redes de Proyecto Habitar, en todos los espacios que lxs organizadorxs consideren convenientes, tanto vía web como físicamente en seminarios, exposiciones y demás espacios vinculados a la temática.

La organización podrá incorporar premios durante el trayecto del concurso hasta la fecha de entrega de la primera ronda.

 

JURADO

El jurado estará conformado por dos representantes de la organización “Aparecida en red ando” dos representantes de Proyecto Habitar y dos arquitectxs invitadxs, que serán comunicados la fecha de entrega de la primera ronda.

 

DISPOSICIONES GENERALES

Todo trabajo que no reúna los requisitos establecidos en las presentes bases será desestimado. Las instituciones que conforman la organización no se responsabilizan por problemas referentes a derechos de autor y propiedad intelectual de los proyectos participantes. La organización tiene el derecho de modificar las bases y condiciones, así como también la escala de premios sin previo aviso a los concursantes. La participación en el concurso implica que el participante conoce y acepta en su totalidad las presentes Bases y Condiciones del Concurso. Asimismo, la aceptación de estas Bases y Condiciones implica una declaración jurada de que toda la información suministrada por el concursante es fidedigna y que todo proyecto presentado es inédito y de su autoría.

[1] Los consultorios de atención primaria de hábitat son una práctica desarrollada por el colectivo de Proyecto Habitar como una prueba piloto generalizable en un sistema público de hábitat. Desde sus inicios, en 2009 el colectivo ha ido replanteando la metodología a los efectos de promover una práctica que integre la multiplicidad de perspectivas que integran el hábitat.

 

 

HACIA UNA POLITICA FEDERAL DE HABITAT

HACIA UNA POLITICA FEDERAL DE HABITAT

Durante los días 12 y 13 de abril se llevó adelante el Encuentro Federal “Hábitat y Territorio” que contó con la participación de “representantes de organizaciones sociales, pymes, académicos, medios de comunicación y diversas comunidades” para “generar acuerdos sobre puntos indispensables en la construcción de una política federal de hábitat”.  Desde esta perspectiva multiactoral se abordaron múltiples dimensiones para pensar en políticas sobre el hábitat y el territorio.

Desde el punto de vista económico se postuló la reactivación de la industria de la construcción como mecanismo de desarrollo económico. En un proceso que, para promover efectos redistributivos, requiere: integrar políticas de suelo, la incorporación de pequeñas y medianas empresas constructoras, así como cooperativas de trabajo en la construcción y en la producción de materiales. La propuesta se dirigió a incorporar el modelo de desarrollo nacional en el debate, que el modelo dominante ha estado siempre ligado a la construcción de desigualdades y al extractivismo.

Al abordar la comunicación de la política habitacional se enfatizó el valor de los trabajadores del Estado quienes sostienen las políticas públicas y cargan con una memoria institucional muy valiosa a la hora de gestionar las políticas de hábitat. Se denunció la deslegitimación que los trabajadores estatales están sufriendo en esta gestión a través de la utilización de mensajes mediáticos que desalientan el rol del estado y legitiman la gestión pública a través de agencias. 

Se puntualizó en el desafío de construir una política nacional y popular en materia de hábitat y territorio desde la perspectiva de Derechos Humanos. Para ello, se propuso un debate que avance sobre las palabras, y formule herramientas en un proceso de fortalecimiento de una nueva mayoría. Un desafío que reúne a quienes luchan por las políticas de hábitat urbano con quienes luchan por las políticas de hábitat rural, ya que se trata de procesos que están íntimamente vinculados en el desarrollo del territorio.

Desde el punto de vista de la gestión, se manifestó la relevancia de herramientas de intervención estatal. Lo que requiere promover la construcción de un conjunto de herramientas para intervenir en el mercado inmobiliario, intervenir en el manejo del suelo. De esta manera, se pretende recuperar de la ganancia de ese mercado, los recursos necesarios para llevar adelante las políticas habitacionales.

Se planteó la discusión sobre la seguridad de los barrios, proponiendo que la misma se encuentre dentro de la gestión de las organizaciones barriales, para garantizar la seguridad en el control social. También la necesidad de feminizar la política habitacional, para cambiar cómo vemos y construimos la ciudad, y nuestros pueblos.

Para la cuestión de las infraestructuras, saneamiento se propuso renovar la discusión y sacarla del ámbito de decisión de los dueños de grandes empresas. Esto implica: discutir el latifundio, discutir el monocultivo de soja, discutir contra los diseños de infraestructura a favor del movimiento de mercaderías de exportación.

Sobre la política de transparencia, se propuso generar un registro público de tierras, y un registro nacional de accionistas, como instrumentos que les permitan a las organizaciones conocer a los actores que están operando bajo el anonimato de las sociedades, en los desalojos, en las compras de tierra rural para el desarrollo de countries, etc.

Se abordó también la experiencia de la autogestión en las políticas habitacionales, mediante procesos económicamente rentables, de generación de trabajo, de capacitación, de fortalecimiento en la participación de las mujeres, y de calidad habitacional.

Desde Proyecto Habitar participamos en el encuentro exponiendo las preocupaciones que recogemos diariamente de nuestra práctica militante-académica-profesional, con ánimos de reunirnos en reflexiones sobre los problemas transversales de la sociedad, y desde allí construir acuerdos sobre las políticas de gestión del hábitat y el territorio.

Enumeramos aquí algunos puntos trabajados:

– La perspectiva de género en el desarrollo de políticas habitacionales.

– El problema de la gestión de los residuos urbanos y el derecho a un ambiente sano.

– El impacto de la inflación en la política pública habitacional y en las precarias condiciones laborales en las que trabajamos.

– El rol de la Universidad como ámbito de debate y construcción de políticas habitacionales.

– La perspectiva relacional de la política urbana, que comprende integrados pares que habitualmente se fragmentan (riqueza-pobreza; formalidad-formalidad; etc.)

Entendemos necesarios estos espacios, en los que nos reunimos desde las diversas experiencias territoriales, desde donde evidenciamos la injusticia y la desigualdad, para construir democráticamente una plataforma de problemas y de propuestas que enfrenten en cada acción y en cada contexto la expresión particular de la opresión.

La violencia pasada y presente en el espacio

La muestra “La violencia en el espacio. Políticas urbanas y territoriales durante la dictadura cívico-militar en Argentina (1976-1983)” puede visitarse en el Centro Cultural Haroldo Conti hasta Mayo de 2019.

 La represión y la violencia estatal que se instaló en Argentina y en la región durante la década del 70 tuvo aristas que despreciaron los derechos humanos en múltiples dimensiones y escalas. A la lucha sostenida por la visibilización del accionar represivo de las fuerzas de seguridad, se integran progresivamente la visibilización de los intereses de otros actores en el periodo, lo que ha permitido revisar la responsabilidad de los medios de comunicación, sectores empresariales y de la estructura de la iglesia, entre otros. Es posible entender como la violencia ejercida ha tenido múltiples manifestaciones estratégicas y tácticas.

La muestra que se titula “La violencia en el espacio” realiza un abarcativa repaso sobre las acciones realizadas por el gobierno de la dictadura en materia de políticas urbanas, registrando actores sociales vinculados a la concentración de la riqueza y el poder, a los que se asocia y defiende en cada una de estas trasformaciones territoriales promovidas.

En el texto que presentan Pamela Colombo y Carlos Salamanca como curadores de un amplio equipo de trabajo reseñan:

“Programas de erradicación de «villas miseria», construcción de autopistas, creación de pueblos estratégicos, rediseño de espacios públicos, edificación de estadios y readecuación de ciudades para la «fiesta mundialista»: estos son algunos de los proyectos territoriales y urbanos realizados durante la última dictadura militar en Argentina (1976-1983) que esta exposición examina. Una reorganización espacial realizada a todas las escalas y en todas las regiones del país, que impactó directamente sobre amplios sectores de población, transformando de manera duradera a la sociedad argentina.”

El repaso por las políticas que transformaron el espacio urbano restituye una unidad de procesos y productos materiales con los que aún convivimos. Acciones que reúnen propósitos de acumulación desigual y de exclusión, represión y sometimiento. Como señalan los curadores la exposición pone de manifiesto situaciones espaciales de injusticia espacial sostenidas y agudizadas en este contexto autoritario, en las que:

“No es el monumento, el estadio o el edificio en sí mismo lo que invitamos a mirar en esta exposición. No existió una dictadura fecunda en edificios y modernización, distinta y separada de aquella que llevó a cabo la desaparición sistemática de miles de personas (…) Hubo un solo gobierno que inscribió la violencia en el espacio y que hizo del espacio el medio y el lugar para crear de manera autoritaria una nueva sociedad.”

La exposición pone al alcance de todas y todos de manera gratuita el producto de diversas y valiosas investigaciones realizadas durante muchos años, lo que constituye un valor destacable en términos de la vinculación del ámbito académico y la generación de un aporte social significativo. Al mismo tiempo, compone una revisión de la totalidad del territorio, restituyendo políticas urbanas y rurales en las que los discursos, los procesos y los productos se orientan en la misma dirección excluyente y represiva.

Como reflexión final, y quizás aporte a los procesos particulares de producción del material teórico e histórico, entendemos que a partir de lo expuesto queda en evidencia la potencia de la operación violenta, cuya impronta mas estructural se instaló y ha podido continuar, con matices, ininterrumpidamente hasta nuestros días. La violencia en el espacio es una manifestación material de un proceso que reprimió la posibilidad de transformar nuestros territorios para hacerlos más justos y democráticos.

Lo esencial del territorio extractivista y la economía concentrada que defendió y amuralló el espacio de la dictadura no ha podido ser transformado y sobrevive en la desigualdad de los barrios populares que lindan con la opulencia de barrios de lujo. Resulta por demás valiosa esta exposición, por el valor de la restitución de los hechos históricos, por la reflexión crítica y profunda del carácter de sus procesos, y por la posibilidad de repensar nuestro presente.

Proyecto Habitar, 15/04/2019

Sitio de la muestra:

http://conti.derhuman.jus.gov.ar/2019/03/av-la-violencia-en-el-espacio.php

 

 

 

Mesa de exposiciones sobre la situación actual de la villa 31

El lunes 5 de noviembre, a las 18hs se llevó adelante, en el Instituto Patria, una charla que puso en discusión la ley 2736. Bajo el título “Villa 31 – 31 bis ¿Urbanización o negocio inmobiliario? Los panelistas invitados reflexionaron y arrojaron algunas claridades sobre el tema. Expusieron para la audiencia: Javier Fernández Castro, Martin Reibel Maier, Guillermo Marzioni, Graciela Aguirre, Juan Enríquez, Hector Cuanco y Paula Penacca. 

Comenzó Javier Fernández Castro quien desde la perspectiva del proyecto arquitectónico dio cuenta de los avances y retrocesos en materia de operaciones constructivas. Fernández Castro denuncia que los cambios al proyecto general que fueron aprobados en su momento no son ingenuos. La diversidad morfológica y material de las viviendas fue recortada a una tipología y la mitad de las unidades (de un total de 2500). Enunció que el desvío de la autopista que iba a integrar a los vecinos espacialmente se sustituyó por una división al interior del barrio y un corralito externo a partir de la continuidad elevada de la autopista costera. También hizo referencia al incremento en el valor de las tierras linderas a la villa, que fueron adquiridas en este proceso por importantes desarrolladores, que ya comenzó a manifestarse en el precio de las mismas.

Luego Martin Reibel Maier, pivoteando sobre su experiencia en ONABE desde la perspectiva del papel del Estado frente a los bienes públicos, recuperó el valor social de este tipo de bienes y la necesidad de políticas redistributivas. En primer lugar, planteó que es necesario recuperar el valor social de los bienes públicos del Estado. Para ello tenemos que trabajar sobre la “técnica, el fomento y progreso de la utilización de los bienes”. En segundo lugar, explicitó que son necesarias políticas de suelo de carácter redistributivo, para ello los bienes públicos deben ser utilizados para vivienda pública. Por último, se calificó la actuación del gobierno de la ciudad en la villa 31 como una prevaricato, es decir como una actuación autoritaria que resuelve sobre temas que pertenecen a una escala superior de la estructura de gobierno. Esto lo dijo específicamente refiriéndose a la venta de predios, cambio de dirección de la traza, cambio de normativa y adjudicación privada de bienes públicos.

Para hablar de los mapeos y relevamientos realizados en 2015 para incorporar la demanda de la población, que no figuraba en el censo del 2010, Guillermo Marzioni contó el trabajo realizado por más de 500 personas. Explicó el proceso de articulación entre organismos estatales, organizaciones no gubernamentales, universidades y funcionarios. Según Marzioni, el valor del trabajo realizado radicó en poner en valor las preexistencias producidas por la comunidad.

Por su parte, Graciela Aguirre denunció, desde una perspectiva jurídica, el atropello que viene llevando a cabo el gobierno de la ciudad, que se verá avalado con la ley 2736. Contó que los únicos 4 accesos que tiene el barrio para el ingreso de ambulancias se encuentran en obra y por lo tanto, a estos vehículos no se les permite acceder. Hace unas semanas hubo un incendio y las condiciones de las calles impidieron el ingreso de la asistencia hecho que se llevó la vida de 4 personas.

También expuso su experiencia Juan Enríquez de Villa Palito, en el proceso de urbanización iniciado en 1999 con el programa Arraigo. Enríquez expuso las dificultades que acarreó la urbanización y el camino que se encontró a partir de la apropiación de los vecinos de dicho proceso.

Cerrando la rueda de disertaciones, Hector Cuanco, vecino del Barrio 31, denunció la inconstitucionalidad de la ley de re-urbanización del Barrio «Padre Carlos Mugica» que promueve el gobierno de la ciudad. Esta ley viola los principios rectores de la ley marco. En el cuerpo de la ley 3.343 se ponía en valor la permanencia y la participación, entre otros valores hoy avasallados. El vecino denuncia la expulsión silenciosa que el gobierno porteño pretende consolidar, y asevera: “está trabajando para que no quede nadie”.
Por último, Paula Penacca rescató los aportes de todos y, retomando las propuestas, recordó que cuando la judicialización del conflicto no alcanza es necesario salir a las calles. Rubén Pascolini agradeció a todos la participación e invitó a seguir vinculados y difundir lo que se conversó ya que hay muy poca información sobre lo que realmente pasa.

Eugenia Jaime
Arquitecta, Urbanista.
Asesoría Urbana por el Derecho a la Ciudad
Proyecto Habitar